Un equipo liderado por el Dr. Hugo Benítez, del Instituto Milenio BASE y la Universidad Andrés Bello (UNAB), resolvió uno de los grandes enigmas de la biología migratoria en Sudamérica. El estudio, publicado en Molecular Biology and Evolution, demuestra que la llamada Mariposa de la Tarde (Vanessa carye) es capaz de realizar viajes comparables a los de aves y mamíferos, convirtiéndose en un nuevo ícono de la resistencia y la conectividad ecológica.

Durante casi una década de trabajo y múltiples colaboraciones internacionales, científicos chilenos lograron descifrar el recorrido migratorio de la Mariposa de la Tarde (Vanessa carye), un insecto emblemático que habita desde Venezuela hasta Tierra del Fuego. La investigación reveló que esta especie emprende una travesía de hasta 15 mil kilómetros (migratorio ida y vuelta), posicionándola entre las mariposas migratorias más notables del planeta.
El estudio fue liderado por el Dr. Hugo Benítez, investigador del Instituto Milenio BASE y del Instituto One Health de la U. Andrés Bello, junto a su equipo del Laboratorio de Ecología y Morfometría Evolutiva (EME Lab). Los hallazgos se apoyan en análisis genómicos y morfométricos que permitieron seguir el rastro de la especie a través de ambientes radicalmente distintos.
“A diferencia de otros animales, resulta casi imposible equipar a las mariposas con transmisores por su fragilidad y alto riesgo de depredación”, señala. Por ello, los investigadores recurrieron a metodologías innovadoras como el estudio de polimorfismos de nucleótido único (SNPs), que evidenciaron altos niveles de heterocigosidad y flujo génico a lo largo de miles de kilómetros.
Esto significa que, pese a recorrer más de 7.000 kilómetros atravesando desiertos, selvas, cordilleras y estepas, Vanessa carye mantiene una sorprendente homogeneidad genética y morfológica. Ni sus alas ni sus características físicas presentan diferencias significativas, lo que sugiere una conectividad constante entre poblaciones y una extraordinaria capacidad de adaptación. Estos resultados fueron esenciales para el desarrollo de la tesis doctoral en Sistemática y Biodiversidad (UDEC) del Dr. Amado Villalobos, miembro del EME Lab que a su vez trabaja de la mano del Mammalogy Lab de la Universidad de Concepción y del Instituto Milenio BASE.

Mariposa migratoria notable
Históricamente, ha existido un debate sobre el estatus migratorio de la especie Vanessa carye. Aunque esta mariposa tiene una amplia distribución (~7,000 km) en Sudamérica y se ha observado en altitudes extremas y lugares remotos, algunos autores científicos han argumentado que su amplia distribución podría deberse a su alta capacidad de movimiento, pero no necesariamente a un comportamiento migratorio definido.
Sin embargo, al analizar la estructura genética, diversidad y morfología alar de esta mariposa, el estudio del Dr. Benítez y equipo arrojó que Vanessa carye tiene características consistentes con una especie migratoria. Y no solo eso, también identificó dos rutas migratorias paralelas: una costera y otra andina.

Ambas permiten a la especie mantener contacto entre poblaciones a lo largo de Sudamérica, generando un corredor ecológico que trasciende fronteras políticas y ecosistemas. Esta doble ruta confirma que Vanessa carye no solo es resistente, sino que también despliega una estrategia migratoria comparable a la de aves como las golondrinas o incluso a grandes mamíferos marinos”, afirma Benítez.
El hallazgo no solo confirma que la Mariposa de la Tarde puede recorrer distancias comparables a las de aves y mamíferos, sino que “también descubrimos que mantiene su identidad genética y morfológica a lo largo de todo el continente. Este hallazgo cambia la forma en que entendemos a este insecto y entrega claves fundamentales para comprender cómo las especies enfrentan ambientes extremos y cambiantes en pleno contexto de crisis climática y transformación de los paisajes”, destaca.
Finalmente, el estudio constituye un ejemplo de cómo la ciencia en Chile puede liderar investigaciones de alcance global, generando conocimiento sobre fenómenos naturales únicos en Sudamérica. En palabras del equipo, la Mariposa de la Tarde no solo conecta territorios a través de su vuelo, sino también une a la comunidad científica en torno a preguntas que cruzan la genética, la ecología y la biología evolutiva.
Por: Instituto Milenio BASE y UNAB
Foto portada: Vanessa carye por Bernardo Segura